¿CUÁL ES TU PEOR MIEDO? UN EJERCICIO SISTÉMICO
Desde el punto de vista de las constelaciones familiares, muchos de los miedos, creencias negativas y bloqueos, las recibimos de forma inconsciente de nuestros ancestros. Acá te comparto un ejercicio.
Pregúntate ¿cuál es tu peor miedo?
Y cada vez que te des una respuesta, anda más y más profundo.
Aqui mi proceso::
¿Cuál es tu peor miedo?
“Ser pobre”. (Aclaro que nunca he sufrido de carencias económicas pero ese miedo surgió de inmediato al hacerme la pregunta.
¿Qué es lo peor que te puede ocurrir si pasa lo que más temes? (Escribir todo lo que se te ocurra.)
“Que no tenga para pagar mis necesidades básicas y que tenga que depender de mi familia; que la gente a mi alrededor me desprecie; que mi familia y yo me culpen de haber tomado malas decisiones; que me sienta avergonzada y decepcionada de mi misma”
¿Qué sería lo más terrible de esto?
Sentir que fallé, que desaproveché mi vida; que soy una carga para otros; me sentiría una incapaz, una fracasada.
El siguiente paso es pensar en quienes de tu familia podrían haberse sentido así
.
Vinieron dos familiares a mi mente con los que siempre me identifiqué por ser bondadosos, sensibles y amantes del arte. Ellos, a pesar de ser inteligentes y talentosos, no lograron tener libertad económica en su edad madura.
Fui un paso más atrás y pensé en mi abuelo materno al que no conocí, pero sabía que tuvo mucha dificultad para sostener a su familia a pesar de ser, según mi familia, un hombre inteligente y capaz.
Todo este proceso me llevó a darme cuenta que al sentirme identificada con ellos, yo inconscientemente había hecho míos sus miedos.
La razón por la cual los miedos o patrones se pasan a un determinado miembro es que el sistema familiar no admite vacíos: Si algo no fue resuelto en su tiempo, ese conflicto se transmite a otro miembro de la siguiente generación.
Yo constele ese miedo invitando a los miembros de la familia con los que compartía ese miedo. Los honre y les pedí que me liberaran de esa lealtad que tenía para con ellos. De este modo no solo me sentí libre sino que pude recibir sus bendiciones, su fuerza y su apoyo.
Esto es lo que hacemos en una constelación. Tomamos consciencia de dónde viene el conflicto, soltamos la lealtad y reconocemos que ese miedo o dolor no era nuestro después de todo y que lo podemos dejar sin dejar de pertenecer al sistema familiar. Y ahora te pregunto a tí: ¿Cuál es tu peor miedo?