SOBRE EL CULTIVO DE LA FELICIDAD

He estado reflexionando acerca de todo aquello que me ayuda a mantener un estado de calma, alegría y felicidad diarias. Esta es la lista de las cosas que hago y de las que dejé de hacer para nutrir y cultivarlas.

 


NO ME CRITICO NI ME CULPO. Dejé de criticarme y recriminarme por lo que hice, no hice o no hice bien años atrás. Si digo algo desagradable en mi contra, me disculpo de inmediato. No dejo que ninguna voz debilite mi autoestima ganada con tanto esfuerzo. Y no se trata de condonar mis faltas. Las admito cuando estoy equivocada, pero no me castigo ni me castigo por fallar. Si hice algo que lastimó a alguien, me disculpo y me digo: “Lo haré mejor la próxima vez.” Si el pensamiento vuelve, lo detengo y me concentro en otra cosa y lo hago tantas veces como sea necesario.

Existe la creencia común de que la autocrítica constructiva nos ayuda a mejorar. Estoy en desacuerdo. Criticarnos a nosotros mismos se centra en nuestros defectos y patrones negativos y en nuestra incapacidad de superarlos hasta ahora. Esto nos debilita y hace que el cambio que buscamos sea más difícil de alcanzar, si no imposible. Tomar conciencia de nuestros fracasos o debilidades sin juicio ni culpándonos, es en mi experiencia, mas efectiva porque esta actitud de aceptación y compasión, nos anima a atrevernos a dar el salto e intentar tantas veces como sean necesarias para alcanzar lo que deseamos. Cuando tenemos una actitud no crítica, el miedo a fallar disminuye o desaparece. Este enfoque le comunica a nuestra mente inconsciente que es seguro intentarlo, que somos confiables y que vale la pena hacer el esfuerzo; y que nos merecemos la satisfacción de lograr lo que estamos buscando.


SUELTO & PERDONO todo lo que no esta alineado con la luz y el amor; no cargo con resentimientos o rabias. Si estoy molesta por algo, lo expreso de manera segura, lo comunico o lo bailo en conexión con los 4 Elementos Naturales; les pido ayuda para limpiar aquello que nubla mi paz y que esa energía sea transformada en algo positivo.


AGRADEZCO a penas me despierto, doy gracias por todas las cosas buenas que hay en mi vida, por mi salud, por estar viva, por mi familia, etc. Reconozco que vivir agradecida eleva mi vibración y trae abundancia a mi vida.


BAILAR (MOVER MI CUERPO) & MEDITAR me conectan con mi mejor versión, con la que soy de verdad, con mi felicidad innata y mi paz interna.


CONFIO. Hace ya unos años que decidí dejar de PRE-ocuparme. Me entrene a confiar en que algo más grande que yo estaba de mi parte y confiar.

ME HAGO RESPONSABLE de lo que está pasando en mi vida. Dejé de sentirme víctima. Sé que mi vida es la expresión de mis creencias, pensamientos y actos. Por eso cuido lo que digo y me digo, pienso y hago. No soy perfecta, pero si consciente en gran medida de la vibración en que estoy y trato de que esta sea la más alta posible el mayor tiempo posible.


TRABAJO EN LO QUE AMO. Elijo hacer el trabajo que me da más satisfacciones. El que me hace sentir realizada. Aquel que alimenta mi alma. Sé que puede ser difícil lograrlo, yo sugiero, que, aunque estemos haciendo algo que no nos llene del todo o incluso no nos guste, bendigamos el trabajo que tenemos y valoremos nuestra contribución. Por otro lado, encontremos tiempo para realizar “algo” que amemos y nos de alegría.

CUIDO MI CUERPO. Llevo una vida sana: hago ejercicio (¡bailo y camino!) y como sano (vegano). A veces como cosas no sanas, como todos, pero trato de que eso sea una excepción.


HONRO & CONECTO CON EL MUNDO NATURAL. Soy consciente de que soy parte de este universo. Aprecio y trato de estar rodeada de naturaleza lo más a menudo posible. Honro a la naturaleza dentro y fuera de mi. Tengo una relación íntima con los 4 Elementos Naturales de apreciación y agradecimiento. Ellos me brindan sus cualidades, me fortalecen, limpian y me conectan con mi lado shamánico. Me recuerdan que soy infinitamente poderosa, sabia y hermosa, como todo lo que existe en este universo.


VEO ABUNDANCIA EN TODO. Cambie mi miedo a la pobreza por conciencia de abundancia. No fue fácil. Que va! A veces, heredamos miedos que cuestan erradicar, pero que si los vemos, hay que soltarlos y cambiar nuestras creencias.


ME AMO & VALORO. Sigo aprendiendo a amarme, a honrarme y a respetarme. Practico el sagrado egoísmo. No digo si cuando quiero decir no. Pongo limites. Elijo bien con quién comparto mi tiempo y mi energía. Somos las personas más importantes de nuestras vidas, esa es mi creencia y vivo de acuerdo con este principio. Eso no me convierte en alguien egocéntrico o egoísta. Soy una persona generosa y empática, pero ya no cruzo los límites de mi propio bienestar para agradar a los demás.

 

Ser felices es para mí el mayor regalo que podemos darnos a nosotros mismos y a los demás.